Cuando trabajas en SEO el contenido es una pata que siempre acabas necesitando, ya sea para un cliente o para un proyecto propio.
Tanto si vas a redactarlo tú como si optas por delegarlo en un tercero, es necesario tener algunas ideas muy claras sobre cómo deben ser estos contenidos para potenciar al máximo su posicionamiento.
Procedamos a desgranar cuál es la mejor forma de escribir textos para SEO.
Índice
Naturalidad
Y lo pongo en primera posición porque posiblemente es lo que más cuesta de asimilar para muchos redactores.
La era de la sobreoptimización con keywords ya ha pasado, y no por poner muchas veces una keyword a lo largo del texto vas a posicionarla mejor.
Es un mensaje muy trillado pero no por ello menos relevante: escribimos para personas. Punto y final.
Trabaja palabras clave
¿Pero no acabas de decir que no le demos importancia a las keywords? Pues ni tanto ni tan poco.
Es totalmente recomendable preparar un listado de palabras clave que queramos posicionar y, sobre todo, que las jerarquicemos. Un paso a paso que siempre te va a permitir dar en el clavo es el siguiente:
- Identifica una temática: ayúdate de un keyword research o del análisis de la competencia para localizar una temática sobre la que quieres escribir.
- Analiza qué keywords posicionan las 3 primeras posiciones en las SERPS para esa temática: pasa dichas urls por herramientas como Ahrefs o Semrush y fíjate en qué keywords están posicionando.
- Anótalas y jerarquízalas: hazlo con lógica y no solo te fijes en el volumen. Debes quedarte con las keywords que claramente se adaptan al contenido que tú pretendes escribir, siempre teniendo en cuenta el search intent de tus querys escogidas.
Plantea una estructura de encabezados
Mientras identificas las keywords que vas a trabajar en el post puedes ir progresando en otras tarea muy útil, que es plantear los encabezados de tu artículo.
Como ya sabes, el H1 deberá contener como mínimo la keyword principal que pretendes posicionar, pero también puedes valerte de los H2 y sucesivos para trabajar otras palabras clave relacionadas que encontraste en el punto anterior.
Pero recuerda, ante todo naturalidad, no empieces a usar keywords en absolutamente todos los encabezados porque eso no tiene nada de natural.
Analiza la competencia
Hay muchas preguntas que la competencia te ayudará a resolver en el momento en que te dispongas a redactar un artículo. Un clásico es el de la longitud mínima de tu texto.
O tal vez quieres tener una idea sobre qué puedes aportar tú de nuevo al tema sobre el que quieres escribir. En estos y muchos otros casos algo tan simple como ver qué ha hecho el resto te será de gran ayuda.
Y lógicamente, recuerda que en SEO los grises predominan sobre los blancos o negros. Que el TOP 1 para la keyword que más te interesa posicionar haya redactado un artículo de 2.000 palabras no significa que tú necesites mínimo 2.001 para superarle.
Pondéralo todo en su justa medida y piensa siempre en primer lugar en satisfacer la búsqueda del usuario.
Legibilidad
En el primer punto hemos hablado de naturalidad, y esta es un componente importante de la legibilidad.
Si nuestro texto está plagado de keywords metidas con calzador el usuario lo percibe y tu mensaje perderá credibilidad, lo que fomentará peores métricas en tasa de rebote, tiempo en página o páginas vistas.
Usa variaciones, sinónimos, plurales y singulares, construcciones parecidas… y no solo enriquecerás semánticamente tu artículo, sino que el usuario lo agradecerá porque será más fácil de leer.
Pero en la legibilidad también influyen otros factores, como son el diseño y la presentación de tu texto. Como tips básicos tendríamos:
- Tipografía cómoda de leer.
- Párrafos cortos.
- Interlineado generoso.
- Uso de negritas.
- Intercala elementos visuales.
- Imágenes y vídeos.
Imágenes y vídeos
No somos conscientes de lo que llegamos a valorar los elementos multimedia en cualquier artículo. De hecho, muchas veces ni tan solo empezaremos ciertas lecturas si vemos que son un tocho de texto infinito sin ningún elemento visual.
No entraremos ahora en la importancia del SEO para imágenes o para vídeo, pero sí quiero insistir en la relevancia que tiene para el usuario y para las métricas de tus contenidos.
Copywriting
Uno de los factores más olvidados al escribir textos optimizados para SEO. Si tienes un proyecto lo más probable es que en última instancia desees vender alguno de tus servicios o productos. En este caso siempre es interesante, si el presupuesto lo permite, que acudas a un redactor con habilidades de copywriting, que sepa incitar al usuario a generarte una venta, un lead, o aquello que te interese.
El copywriting puede hacer lo mismo por ti que el CRO a una web en su globalidad: aumento de la productividad con prácticamente los mismos recursos, en este caso a través del poder de las palabras.
Ya tienes una idea más elaborada sobre qué implica escribir textos para SEO y cómo sacar el máximo partido de tus artículos. Recuerda que a partir de aquí habrá muchos otros factores que intervengan en el posicionamiento de tus artículos, tanto onpage como offpage.